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sábado, 14 de febrero de 2015

Base para pizza de coliflor.

- Mamá, ¿para que es esa coliflor?
- Nada, hija, es para... una cosa.

Me hubiera encantado mantener el secreto durante más tiempo, pero  ponte a rallar una coliflor un domingo por la mañana en una casa  de menos de noventa metros cuadrados, sin que tus hijos se enteren: viene siendo tarea imposible. Y si encima montas el chiringuito para hacer fotos mientras cocinas, etc... las posibilidades de pasar inadvertida se esfuman. Porque a ver, que no lo he dicho todavía... la coliflor era  para hacer una "masa" de pizza, aunque teniendo en cuenta que no lleva harina, ni levadura, ni líquido, quizás lo de llamarlo masa sea un poco una herejía, así que me voy a referir a ella como base.

Mirad que aspecto tan apetitoso tiene el resultado final, nadie diría que lleva una coliflor entera... Y mira que me hubiera gustado someterlos a una cata a ciegas, a ver si adivinaban el ingrediente secreto, pero debo decir que, en cualquier caso, se la comieron sin rechistar, ¡incluso dijeron que estaba muy buena!.


Pizza con base de coliflor. Testada en adolescentes.


La primera vez que vi esta receta en Internet me quedé bastante sorprendida, y tenía mis dudas de que esto realmente resultase un plato apetecible. Máxime cuando algunos de los comentarios que dejaban los lectores de los blogs en los que aparecía la receta relataban como, al intentar hacerla, la masa les había quedado demasiado  húmeda, o no habían podido despegarla del papel... en fin, que parecía difícil cogerle el punto a la cosa. Así que después de mucho indagar, y de hacer alguna que otra variación, preparé esta que da como resultado una base más que digna. Vamos, yo diría que dignísima. El secreto está en eliminar humedad de la coliflor antes de mezclarla con los demás ingredientes... Pero vayamos con la receta, y más adelante veréis a lo que me refiero.

Ingredientes (solo la base de la pizza):

  • Una coliflor pequeña
  • 50 g de queso mozarella rallado
  • 50 g de queso parmesano rallado
  • Un huevo
  • Sal, ajo en polvo, orégano, aceite de oliva

Preparación:

Lo primero que vamos a hacer  con la coliflor es eliminar las hojas y rallar toda la parte blanca. Una vez rallada, la metemos (en un recipiente apto, y tapada) en el microondas y la cocinamos durante 4 minutos.


Solo rallaremos las "flores", desechando la parte del tronco.


A continuación, y este es el paso importante para que al final tengamos una base de pizza crujiente, volcamos la coliflor sobre un paño de algodón limpio, y dejamos que se enfríe lo suficiente para poder manipularla, ya que lo que vamos a hacer es apretar y estrujar para extraer todo el líquido posible. Mirad la cantidad de líquido que obtuve tras este paso:




Mezclamos ahora la coliflor con el resto de los ingredientes,  colocamos la mezcla en la bandeja, sobre un papel de horno, y le vamos dando forma redonda. Vamos, que se parezca a una pizza :-)




En el horno, a 200 ºC, la tendremos sobre unos 10 minutos, aunque esto depende de cada horno, y lo mejor es ir echándole un vistazo hasta que esté ligeramente dorada, con el aspecto que se ve en la foto que sigue. Debo decir que, de ese tiempo, la habré tenido la mitad con calor solo la parte inferior del horno, y la otra mitad, con calor arriba y abajo y la función turbo.



Y con esto ya tenemos la base de pizza preparada para ponerle el resto de ingredientes al gusto (esta llevaba tomate, jamón cocido, mozarrella y orégano) y meterla de nuevo el el horno como si fuera una pizza normal.




¡Espero que os haya gustado la receta de hoy, y os animo a hacerla! ¡El resultado os sorprenderá!

sábado, 15 de septiembre de 2012

Tartita ligera de yogur


¿A que es mona?  

Es que, no sé porqué, los postres pequeñitos siempre atraen nuestra atención: petit fours, minicroissants, micromagdalenas... ¿Será que nos sentimos menos culpables al pensar que, con esas dimensiones, son inofensivos?

Esta mini tarta de yogur  además es muy ligera, y os la dejo en receta para una sola persona... ¡Una tentación para la que no hay excusas!

Ingredientes (para 1 tartita):

1 yogur desnatado natural
una cucharada de mermelada
una cucharada de zumo de limón
4 o 5 galletas integrales
1 cucharadita de mantequilla o margarina
1 y 1/2 hojas de gelatina 
dos cucharadas de leche evaporada (tipo Ideal de Nestle)
edulcorante

Elaboración:

En un bol mezclamos el yogur, edulcorante al gusto (yo he puesto una cucharadita de café de estevia), el zumo de limón y la leche evaporada.
Ponemos en agua fría las hojas de gelatina, hasta que estén blandas. Ponemos tres cucharadas de agua a hervir en una cazuela, y disolvemos en ellas las hojas de gelatina previamente ablandadas. Cuando estén disueltas, colamos y añadimos a la crema de yogur.
Trituramos las galletas y las mezclamos con la mantequilla. 
En el plato donde vayamos a servir la tarta ponemos un aro de emplatar y formamos la base de la tartita con la mezcla de galletas y mantequilla, presionando bien. (Nota: si no tenéis aro de emplatar, haced como yo y utilizad una lata de conservas -en mi caso, de piña en almíbar- a la que habréis quitado la base). Ponemos el plato con el aro y la base de galletas unos minutos en el congelador para que se endurezcan.
Vertemos la crema de yogur y dejamos enfriar unas siete horas para que se cuaje.
Desmoldamos, cubrimos con la cucharada de mermelada y adornamos al gusto.




domingo, 8 de enero de 2012

Albóndigas al horno (sin freír).




Antes de nada quiero saludaros después de tantos días y desearos un buen 2012. ¿Ya habéis hecho vuestra lista de buenos propósitos? Seguro que sí, todos la hacemos; ahora y en septiembre, aunque sabemos que de esa lista no cumpliremos ni la mitad. Con la edad te vas dando cuenta de que no vale la pena hacer muchos planes, porque seguramente el próximo año tendrás que hacer de nuevo exactamente los mismos que el anterior... Así que yo de momento solo me he propuesto uno: intentar dormir ocho horas cada día. Teniendo en cuenta que me levanto a las siete de la mañana, eso supone dormirme a las once...Pero no sé si a vosotros os pasa, el caso es que a mí a esas horas me posee una especie de fuerza sobrenatural que me impide irme a la cama...¡Incluso cuando no tengo, objetivamente, nada que hacer! Me "lio" yo sola con cualquier cosa y acabo durmiendo mucho menos de lo que mi cuerpo necesita, teniendo en cuenta el ritmo que llevo durante el día. Al final, con un poco de suerte, acabo por acostarme a las doce de la noche, así que a ver si mejoro un poco en esto...

Un propósito que se repite entre la mayoría es el de "este año voy a comer más sano". Seguramente, junto con el de "me apunto a un gimnasio (y pienso ir todos los días)" y el de "este año aprendo inglés", ocupan el podio en la lista de buenas intenciones para un año que se estrena y que nos inclina a pensar que estrenamos vida, o al menos un nuevo ciclo. Para ayudar a todos los que este vaya a ser su mantra durante el 2012, y para todos aquellos que queráis disfrutar de unas albóndigas con menos grasa y  menos calorías, aquí os dejo esta receta.

Ingredientes:

1/2 k de carne picada (de ternera o mezcla de ternera y cerdo)
1/2 cebolla
3 dientes de ajo
2 huevos
perejil
4 cucharadas de pan rallado
aceite de oliva, sal y pimienta

Para la salsa: 
1 puerro
1 zanahoria
un trozo de pimiento rojo
400 g de tomate triturado (un bote)
aceite de oliva, sal

Preparación:

Pelamos los dientes de ajo y los picamos; picamos también la cebolla. En una cazuela o sartén ponemos un chorrito de aceite y los rehogamos hasta que la cebolla esté trasparente. En una picadora o robot trituramos estas verduras rehogadas junto con el perejil, el pan rallado y finalmente también el huevo, la sal y la pimienta. Añadimos la mezcla resultante sobre la carne picada, mezclando a fondo para que quede bien incorporada.
Con las manos humedecidas en agua, vamos formando las albóndigas que pondremos en una bandeja de horno, sobre una lámina de silicona o papel de hornear. Las cocinamos a 190º C hasta que hayan cogido color; entonces, con una pinza de cocina les damos la vuelta con cuidado para que se tuesten un poco también por el otro lado.
Mientras las albóndigas están el el horno, iremos haciendo la salsa (podéis hacer esta o cualquier otra salsa de tomate que os guste). Troceamos y rehogamos por este orden: la parte blanca del puerro, la zanahoria y el pimiento, incorporando finalmente la sal y el tomate, y bajando el fuego para que se cocine lentamente.
Cuando las albóndigas hayan tomado color en el horno por ambos lados, las incorporamos a la salsa y cocinamos durante otros diez minutos.

Nota: aprovecho para crear la etiqueta "Versión ligera de recetas de siempre", para que las tengáis todas más a mano. (Espero añadir muchas en el futuro).

domingo, 15 de febrero de 2009

Bizcocho-oso de yogur (¡ y con poco aceite!)





La receta del bizcocho de yogur creo que es de sobra conocida en todas las casas. Es de lo más socorrido para hacer un bizcocho sin complicaciones y disfrutarlo en el desayuno. En esta ocasión el motivo o la excusa para prepararlo fue el empeño de mi hija de seis años en usar el molde de silicona con forma de oso que teníamos un poco abandonado... así que nos pusimos manos a la obra.... o mejor dicho se puso ella manos a la obra, pues siguiendo mis indicaciones lo preparó solita.

Ingredientes:

1 yogur natural
3 huevos
2 medidas de yogur de azúcar
3 medidas de yogur de harina
la cáscara rallada de un limón
1 cucharada de aceite
1 sobre de levadura de repostería
mantequilla para engrasar

Preparación:


Batimos los huevos, y los mezclamos bien con el azúcar. Agregamos después el yogur poco a poco mezclando bien. A continuación echamos la harina, la ralladura de limón y el aceite. Mezclamos todo bien y por último agregamos la levadura en polvo.
Engrasamos un molde con mantequilla y vertemos en él la mezcla del bizcocho. Horneamos a 160º durante una hora aproximadamente. Lo sacamos y dejamos enfriar.

viernes, 14 de marzo de 2008

Tortilla de patatas con microondas.


Esta es la forma en la que últimamente preparo la tortilla de patatas. Si, ya sé que habrá gente que dirá que no es "la auténtica", y estoy de acuerdo. Me explico: se pelan y cortan las patatas y las cebollas como siempre y se ponen en un recipiente apto para microondas. Se les añade sal,un chorrito de agua y un chorrito de aceite de oliva (la cantidad es como quien aliña una ensalada) y se meten al microondas. En cuanto a los tiempos, pues depende del tamaño de tortilla que queramos hacer, del tipo de patatas, del tipo de microondas...Así que lo mejor es cada 5 minutos abrir, remover, comprobar y si es necesario poner cinco minutos más... Para la tortilla de la foto, necesité hacer esa operación un par de veces...
Una vez cocinadas, batimos los huevos, mezclamos con las patatas y las cebollas y cuajamos en una sartén en la que previamente habremos calentado un chorrito de aceite de oliva.
¡Qué queréis que os diga! Me ahorro el trabajo de freir, la tortillla resulta mucho más ligera y de sabor está realmente buena. Probadla, porque os sorprenderá...



jueves, 14 de febrero de 2008

Pudin de verduras


Este es un pudin de verdura muy ligero, ya que sus componentes principales son verduras y huevo. A diferencia de otros púdines no lleva ningún lácteo (nata, leche evaporada...).
Explicaré como hacerlo según el método tradicional y mi adaptación a la Thermomix.

Ingredientes:

500 g de zanahoria
250 g de brócoli
1 calabacín mediano
4 huevos
40 g de mantequilla + 1 cucharadita
2 dientes de ajo
2 cucharadas de queso parmesano rallado
sal, pimienta

Preparación (método tradicional):

- Pelar las zanahorias, cortar 400 g en dados y 100 g en tiras planas y finas. Cortar el calabacín en lonchas a lo largo y separar el brócoli en ramitas.
- Hervir cada verdura por separado en agua con sal hasta que estén tiernas. Escurrir y reservar.
- Untar el molde de mantequilla y espolvorearlo con el queso rallado.
- Freir los ajos pelados en la mantequilla hasta que se doren, ponerlos en el vaso de la batidora junto con los huevos, la zanahoria en dados, la sal y la pimienta. Triturarlo hasta convertirlo en un puré.
- Colocar en el molde una capa del puré. A continuación repartir encima las láminas de zanahoria, cubrir con otra capa de puré y terminar de rellenar con los demás ingredientes.
- Poner en el horno a unos 180 ª hasta que esté firme y al pincharlo con un palillo éste salga limpio.
- Retirar del horno, dejar enfriar y desmoldar.

Preparación (Thermomix):

- Pelar las zanahorias, cortar 400 g en dados y 100 g en tiras planas y finas. Cortar el calabacín en lonchas a lo largo y separar el brócoli en ramitas.
- Colocar los calabacines y el brócoli en el recipiente varoma y reservar
- Poner el cestillo en el vaso, añadir un litro de agua con sal, y programamos 25 minuto, temperatura varoma, velocidad 2.
- En cuanto empiece a salir vapor, echar con cuidado las zanahorias por el bocal (caerán en el cestillo) y colocar el recipiente varoma sobre la tapa.
- Una vez transcurrido el tiempo, comprobar que las verduras estén tiernas, de no ser así, programar unos minutos más.
- Retirar el recipiente varoma y el cestillo, reservando las verduras hervidas. Vaciar el agua del vaso, enjuagar y secarlo bien.
- Poner en el vaso la mantequilla con el ajo pelado. Programar 3 minutos, 100º, velocidad 1.
- Añadir los huevos, la sal, la pimienta, y las zanahorias en dados. Triturar 15 segundo a máxima velocidad.
- Untar el molde de mantequilla y espolvorearlo con el queso rallado.
- Colocar en el molde una capa del puré. A continuación repartir encima las láminas de zanahoria, cubrir con otra capa de puré y terminar de rellenar con los demás ingredientes.
- Poner en el horno a unos 180º hasta que esté firme y al pincharlo con un palillo este salga limpio.
- Retirar del horno, dejar enfriar y desmoldar.

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